La piel seca parece un tema menor...hasta que lo padeces. Las manos secas pueden ser embarazosas, antiestéticas y hasta puede ser doloroso. En casos severos, la piel puede tornarse tan seca que se corta y sangra. Tener las cutículas secas puede conducir a uñas rotas y quebradizas. Pero cambiar tus hábitos y cumplir con tu nuevo régimen, puede garantizar un alivio.
Bebe más agua. El agua ayuda a hidratar desde el interior. Trata de beber por lo menos de seis a ocho vasos de agua todos los días.
Lava tus manos con un jabón hidratante o grasoso y con agua tibia, no caliente. Aplica estas mismas reglas a las duchas y los baños de inmersión. Lava tus manos con menor frecuencia, si es que puedes.
Usa crema para manos, mejor si es espesa, después de lavarte las manos. Puede parecer un paso adicional, pero tu piel es más receptiva a los humectantes cuando está húmeda. Aplicar la crema después de lavarte las manos te ayudará a evitar la sequedad habitual.
Usa guantes cuando laves los utensilios de cocina, cuando limpies o cuando uses detergentes o productos químicos. Los guantes de goma forrados de algodón son una buena opción.
Usa guantes por la noche. Tal vez no seas una estrella de Hollywood, pero en el caso de una piel ultra seca, lo que parecería exigencia, es simplemente necesario. Puedes encontrar guantes hidratantes en tu farmacia o tienda departamental. Coloca abundante crema hidratante en tus manos y luego colócate los guantes antes de irte a dormir.
Aplícate crema para manos con frecuencia en la oficina. Muchas oficinas tienen aire acondicionado y/o calefacción, creando entornos secos que arrugan la piel.
