Las pestañas dicen mucho de nosotras. Hace que un maquillaje normal, se convierta en espectacular, eso si, no siempre todas las máscaras de pestañas cumplen ni la misma función ni son las adecuadas para un maquillaje u otro. Por eso hoy, vamos a conocer un poco más sobre las máscaras de pestañas.

Normalmente el éxito de una máscara de pestañas, reside en su cepillo y en la fórmula de su pigmentación. Aún así todavía nos encontramos con máscaras de pestañas que nos dejan pegotes, grumos o apelmazan las pestañas dejándolas horribles.

Cuando buscamos una máscara de pestañas, queremos que las alargue, que las densifique, que las deje curvadas, separadas y definidas, y sobre todo, que no queden rígidas, que sean flexibles y que no nos deje el ojo negro con el paso de las horas. ¿Existe la máscara de pestañas perfecta?

Para poder elegir la máscara de pestañas ideal para nuestro maquillaje, es fundamental que conozcamos como son nuestras pestañas.

¿Cómo son tus pestañas?

Las tengo largas, muy curvadas pero con muy poco pelo. Aquí lo ideal es elegir una máscara de pestañas que nos aporte grosor, y aplicar varias capas para dar consistencia y movilidad a la pestaña y quede bien frondosa.
Mis pestañas son normales no destacan ni por ser demasiado densas, ni por ser muy largas. En este caso, buscaremos una máscara que nos de volumen, y las haga más largas. Eso si,no te olvides de utilizar el rizador, ¡tu mejor aliado!
Son muy pero que muy cortas. En este caso, elegiremos una máscara de pestañas que haga que nuestras pestañas parezcan más largas y definidas.
Las tengo muy largas y finas. Buscaremos una máscara de pestañas que nos de mucho volumen pero que no las deje demasiado apelmazadas.
Elige máscaras de pestañas ligeras.
Son muy cortas pero muy abundantes. Lo que necesitamos ahora es que parezcan más largas, y para ello aplicaremos la máscara de pestañas desde el lagrimal hasta el exterior para que parezcan más largas.
Son largas pero muy tiesas. Utiliza siempre un rizador y una máscara con efecto curvado para darle un doble toque.

 

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